El Xefe político de esta Provincia y el Ayuntamiento Constitucional de Vitoria, a los habitantes de esta Ciudad... Vitorianos, nunca creímos la necesidad de recordaros la primera de las obligaciones de todo español... Los sucesos ocurridos en esta ciudad antes de ayer tarde y ayer mañana, pudieron nacer de buenos sentimientos, pero en los movimientos populares, no es posible guardar orden ni seguir un plan... Fuera de nosotros los bullicios y movimientos populosos de los quales sólo resultan desórdenes y catástrofes porque los malos se aprovechan de ellos parte entregarse a excesos